Christina Hendricks en Zac Posen. Es un crimen resaltar de tal forma los atributos, no le sienta el color y la silueta la aumenta de peso; las plumas la hacen ver ataviada. Pocas veces este diseñador elabora bonitos vestidos de noche, casi nunca es una elección segura.
Amy Poehler en Max Azria. No me convence ni el corte tan simple del vestido, ni el escote profundo y menos los pliegues que le aumentan kilos. Además el largo del vestido lo hace ver ordinario.
Betty White. Reconozco que es una leyenda, pero su elección es de lo más descuidada. Grandes diseñadores tienen buenas propuestas para mujeres adultas. Helen Mirren es un buen ejemplo a seguir para las divas de antaño.
Rita Wilson en Prada. Peca por el exceso de brillo y piedras. Además los zapatos cuajados de lágrimas de cristal son de muy mal gusto aunque sean de Prada.
Keri Rusell en vintage Jean Louis Scherrer. Muy playera su elección, le faltan elementos de diseño e insisto con el largo, lo hace ver ordinario o de tienda de alquiler.
Jane Lynch en Ali Rahimi. Me gusta el color, pero el corte le aumenta las caderas. Además ella es una mujer brusca, no sabe lucir estos diseños. Se vería bien en un Lanvin.
Eva Longoria en Robert Rodríguez. Es un lindo vestido, pero estoy cansado de verla en la misma silueta. Creo que resalta su pequeña estatura. Es una mujer con un cuerpazo que debería atreverse con otros diseños.
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